Según las prácticas financieras internacionales, habrá una diferencia de precio entre comprar y vender un producto financiero.
Para evitar el arbitraje garantizado y reflejar el costo de mantener un producto financiero, el precio de venta suele ser más alto que el precio de oferta.
Debido a la característica de venta corta de los CFD, el precio de venta indica un precio al que el inversor está dispuesto a comprar y mantener un objeto cuyo precio espera que suba.
Por el contrario, el precio de oferta es un precio al que el inversor está dispuesto a comprar un objeto y espera que su precio baje.